La carne es una fuente de proteínas fundamental para cualquier dieta equilibrada. Y una buena opción para disfrutar de la carne puede ser elegir lomo de cerdo. El lomo está asociado al espinazo y a una zona situada bajo las costillas del cerdo, como conocen muy bien los operarios del Mataderos Insulares de Gran Canaria.
El lomo de cerdo tiene forma cilíndrica y se suele presentar seco o adobado, el famoso lomo adobado. También es parte de la carne preferida en bocadillos (montado de lomo).
El lomo de cerdo es una carne magra, una alternativa perfecta por su bajo contenido en grasa con respecto a otros cortes de cerdo, como las chuletas o el tocino.
Además, el lomo de cerdo proporciona a la dieta vitaminas, minerales y una larga lista de nutrientes. Si quiere conocer todos esos beneficios del lomo de porcino con detalle, siga leyendo. Razones para elegir lomo de cerdo.
– Calorías. El lomo de cerdo es relativamente bajo en calorías, una porción de 100 gramos aporta sólo unas escasas 95 calorías.
– Grasa. La grasa que contiene una pieza de lomo de 100 gramos suma apenas 1,8 gramos. Hay que recordar también que la grasa ayuda a absorber las vitaminas de los alimentos, al tiempo que colabora en la generación de la energía necesaria para activar las funciones del organismo. Y más si se tiene un estilo de vida activo.
– Proteínas. En una pieza de lomo de cerdo con esos 90 gramos, 17,8 gramos son pura proteína. Las proteínas son también básicas para la regeneración de los tejidos y para la producción natural de hormonas en el organismo.
Minerales
– Selenio. El lomo de cerdo contiene minerales esenciales como el selenio. El selenio contribuye a la regulación de las hormonas tiroideas, así como al correcto desarrollo de las células que forman los vasos sanguíneos. 90 gramos de lomo de cerdo contiene 26,2 microgramos de selenio, el 48% de la ingesta diaria recomendada.
– Fósforo. El fósforo es otro mineral esencial. Contribuye a la actividad enzimática del organismo, forma parte del ADN y ayuda a consolidar el tejido óseo. Cada 90 gramos de lomo de porcino, contiene 210 miligramos de fósforo, el 30% de lo que se recomienda ingerir cada día.
– Vitamina B1. El lomo de cerdo incrementa significativamente la ingesta de tiamina, la vitamina B1. La tiamina activa las coenzimas que el organismo humano necesita para realizar el denominado Ciclo de Kreb, una serie de reacciones químicas que aportan energía al cuerpo humano. Cada 90 gramos de lomo de cerdo, contiene 90 miligramos de tiamina, el 77% de la cantidad diaria recomendada para las mujeres y el 71% de la que necesitan los hombres.
– Colina. La colina es un nutriente esencial que es soluble en el agua. La colina contribuye en la comunicación entre las células nerviosas, ayudando, además, a metabolizar el colesterol. 90 gramos de lomo contienen 69 miligramos de colina. El 13% de lo que necesita diariamente un hombre y el 22% de lo que precisa una mujer.
Cocinando lomo
Y dos recomendaciones gastronómicas para disfrutar de esta carne:
– Asada y a la parrilla. Tanto en un caso como en otro, no es preciso añadir aceite. La de la propia carne es suficiente. La salsa de barbacoa puede contener azúcar y aceites añadidos.
– Sazonar. En vez de echar sal a cada pieza, una buena opción es añadir ajo en polvo o pimentón.
El lomo de cerdo es una carne que hay que saber apreciar. Se puede empezar con estas razones para cargarse de motivos.